Fuente: Reforma/ Staff
- El Gobierno federal presumió ayer que ya están terminados 70 kilómetros de vías del Tramo Uno del Tren Maya.
El Gobierno federal presumió ayer que ya están terminados 70 kilómetros de vías del Tramo Uno del Tren Maya pero, en teoría, inicialmente, los 226 kilómetros de dicho tramo tenían que haber sido entregados por las constructoras al cierre de agosto de 2022.
El consorcio de Mota Engil, China Communications Construction Company y otras tres empresas, ganó el 23 de abril de 2020 el contrato de 15 mil 538 millones de pesos para construir el tramo de Palenque, Chiapas, a Escárcega, Campeche.
“La construcción de la vía férrea deberá ser concluido en su totalidad, en un plazo no mayor de 28 meses contados a partir de la fecha de inicio de los trabajos”, se estableció en el contrato y bases de la licitación.
Pero han pasado casi 35 meses de que se formalizó el contrato el 30 de abril de 2020, y Fonatur informó ayer que sólo están terminados 70 kilómetros de la vía, es decir el 31 por ciento, no obstante que éste fue el primer tramo en el que se iniciaron trabajos.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador dio el banderazo de salida a las obras el 4 de junio de 2020.
Eso quiere decir que en poco más de 33 meses de trabajos sólo fue posible terminar un promedio de 2.1 kilómetros de vía por mes.
La contratista, cuyo nombre oficial es Consorcio Latam Tramo 1 SAPI, tenía cuatro meses para entregar el proyecto ejecutivo, contados a partir del 30 de abril de 2020.
En su informe más reciente, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) detalló que Fonatur firmó cinco convenios modificatorios con Consorcio Latam, que incluyeron tres prórrogas para la entrega del proyecto ejecutivo, mismo que aún no estaba terminado en junio de 2021, y aparentemente fue entregado a finales de ese año.
Javier May, director de Fonatur, también mencionó ayer avances de 60 por ciento en puentes, 75 por ciento en viaductos y que se cuenta con el 42 por ciento del balasto necesario para terminar toda la vía, es decir, la grava sobre la cual se colocan los durmientes, cuya escasez en el sureste del país ha sido un factor central para los retrasos.
La situación, sin embargo, era mucho peor en agosto de 2022, según reportes de la Sedena hackeados por el grupo Guacamaya.
En esa fecha, sólo se había recibido el 11 por ciento de los 517 mil metros cúbicos de balasto que se requieren para el tendido de las vías, y no se había terminado uno solo de los 57 puentes, pasos vehiculares, pasarelas peatonales, pasos de fauna y viaductos.
De durmientes de madera, en tanto, se había recibido sólo el 30 por ciento de las 457 mil piezas, mientras que May dijo ayer que ya se tiene el 80 por ciento.
Los avances de los últimos siete meses indican que el consorcio se ha enfocado en las obras complementarias, pues no puede terminar la vía mientras no cuente con el balasto necesario.