El Sol del Centro/ Norma Julieta del Río Venegas
Desde julio del 2022 abrimos un diálogo y coordinación permanente con la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) presidida por el Ingeniero Francisco Solares Alemán. El vínculo se ha mantenido y fortalecido en el tiempo.
Mañana se llevará a cabo el “30 Congreso Mexicano de la Industria de la Construcción. Infraestructura es bienestar. Invertir para crecer. Crecer para igualar”. Este evento nos permite recordar la importancia que tiene la industria para el desarrollo económico y social de nuestro país. Y quiero resaltar que el acceso a la información se liga con esta industria como una herramienta fundamental de las empresas para identificar áreas de oportunidad y fortalecer la competitividad.
La CMIC es un organismo empresarial comprometido con la transparencia y con la rendición de cuentas. Prueba de ello es la existencia del Observatorio de la Construcción que cuenta con el respaldo del INAI. Desde 2015, aprovecha al máximo las herramientas que proporciona el derecho de acceso a la información para dar seguimiento a los procedimientos de contratación de las principales dependencias, proyectos emblemáticos de infraestructura y los programas Nacional de Reconstrucción; de Mejoramiento Urbano; y de pavimentación de caminos en el país.
Así pues, a partir de información pública, esta Cámara da puntual seguimiento a los avances de contratación, las modalidades de licitación, a las empresas ganadoras, y mucha más información que sistematizan y publican mes a mes.
Tanto la CMIC como el INAI promueven en conjunto la transparencia y la rendición de cuentas en los proyectos de infraestructura y obra pública. Lo logran a través del conocimiento y análisis de información que contiene datos claves de todo el ciclo de proyecto y obras (identificación, preparación, contratación, ejecución y evaluación). Para este fin se apoyan de herramientas tecnológicas basadas en plataformas de información focalizada.
¿Por qué es importante?
Porque una de las principales demandas para acabar con la corrupción es transparentar todo lo relacionado con las contrataciones públicas. En este rubro entran, por supuesto, las obras, lo cual permite recuperar la confianza pública, fomenta la participación ciudadana y fortalece la rendición de cuentas. La ciudadanía y toda parte interesada puede supervisar cómo se gastan los recursos públicos en proyectos de infraestructura. No perdamos de vista que cuando hay claridad sobre los procesos y los fondos, se puede responsabilizar a las autoridades y a las empresas contratistas, lo que a su vez se convierte en acciones de prevención contra la corrupción.
Recordemos: obras públicas como el desazolve de un río en un municipio o la construcción de megaproyectos en regiones enteras, son obligaciones de transparencia que hay que cargar de manera trimestral en la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT) y que están sujetas al escrutinio público.
Antes de concluir, no quiero dejar de mencionar que dentro de las obligaciones más descargadas desde la PNT en datos abiertos se encuentran los procedimientos de adjudicación directa con 882 mil 589 descargas y los procedimientos de licitación pública e invitación a cuando menos tres personas con 875 mil 715 descargas.
Los contratos son públicos, no aplica ninguna reserva ni clasificación, menos con el argumento de “seguridad nacional”. Apostemos a la transparencia por este gremio.