Fuente: El Economista/ Miguel Hernández
Autoridades locales consideran importante capacitar más al personal en instalaciones de paneles solares, esto mediante certificaciones, así como en el manejo de plantas de energía eólica, porque se tendrá alta demanda de mano de obra calificada.
“Firmas están interesadas en concretar inversiones en territorio poblano, pero a la fecha no se han concretado por la reforma energética del gobierno federal actual, pero creemos que se aterrizarán para cumplir con la agenda ambiental 2030”. Sergio Zugasti, presidente del clúster energético de Puebla.
Puebla, Pue. Por el fenómeno del nearshoring, Puebla debe aprovechar su potencial para generar energías limpias para atraer nuevas inversiones, porque las empresas que buscan migrar sus operaciones a México y vean a la entidad como destino van a demandar ese tipo de suministro, expuso el presidente del clúster energético de Puebla, Sergio Zugasti Mattar.
En entrevista con El Economista, mencionó que hay mucha exigencia de clientes en otros países por energías que provengan de fuentes limpias, y en el territorio mexicano será la misma por parte de empresas relacionadas con el nearshoring, aspecto en el que autoridades locales deben poner atención si pretenden atraer inversiones.
Puebla, resaltó, comenzó a producir energía eólica desde el 2016, pero hay un potencial en fotovoltaica, que en la actualidad es la que más se genera por parques instalados en el interior del estado desde el 2018; además, hay capacidad para abastecer de luz a partir de la biomasa.
Mencionó que firmas alemanas, francesas, inglesas y canadienses de energías limpias están interesadas en concretar inversiones en territorio poblano, pero a la fecha no se han concretado por la reforma energética del gobierno federal actual, “pero creemos que se aterrizarán para cumplir con la agenda ambiental 2030”.
No obstante, insistió que ante las oportunidades que representa el nearshoring, el suministro por fuentes renovables se tiene que detonar en la entidad para hacerla más atractiva como destino de inversión, al tiempo de reconocer que sólo se han explotado 2 kilómetros de potencial solar con la instalación de parques fotovoltaico, cuando puede ser mayor.
Requerimientos
Zugasti Mattar destacó que están promoviendo la energía fotovoltaica, así como otros proyectos con el gobierno del estado, para que las empresas de energías renovables se consoliden.
Indicó que es importante capacitar más al personal en instalaciones de paneles solares, esto mediante certificaciones, así como en el manejo de plantas de energía eólica, porque se tendrá alta demanda de mano de obra calificada.
Para el clúster de energía es importante una mayor sinergia no sólo con el gobierno federal sino con la academia para tener egresados más preparados y que respondan a la necesidad de personal con especialización.
El presidente del clúster recalcó que están apoyando la electromovilidad para consolidar un nodo en la materia, así como también buscar que lleguen más empresas.
Cartera de proyectos
Por su parte, el secretario de Economía estatal, Ermilo Barrera Novelo, quien a su vez encabeza la Agencia de Energía del Estado, dijo que hay mucha inversión en gas natural, en parque fotovoltaicos y eólicos, y que la actualización de la política energética federal limitó la posibilidad de que algunos proyectos se lograrán concretar en Puebla.
Reveló que tienen una cartera de 10 proyectos de inversión, sobre todo fotovoltaicos en diferentes procesos regulatorios, los cuales requieren seis permisos distintos, algunos llevan tres y otros se encuentran en la parte de su diseño. Sin embargo, admitió que son de largo plazo.
Los proyectos concretados para el territorio poblano en parques solares son el de Iberdrola en el municipio de Cuyoaco, el cual genera 200 megawatts y cuya inversión asciende a 235 millones de dólares.
Además, la francesa ENR NL invirtió 330 millones para hacer su denominado Parque Fotovoltaico Pachamama II en el municipio de Tepeyahualco, el cual genera 330 megawatts.
Expectativas
En marzo del 2020 se presentó la agencia estatal de Energía (cuando la administración local estaba a cargo del gobernador Miguel Barbosa Huerta), la cual tenía como objetivo atraer inversiones privadas en proyectos de energías renovables y gas natural, teniendo en ese momento 16 anteproyectos con carta intención, los cuales, si se hubieran concretado, implicarían 20,000 millones de pesos.
Por lo anterior, se habían detectado 1.4 millones de hectáreas en el estado, susceptibles para producir energía solar y eólica.
Entre las expectativas estaba reducir 22% la emisión de gases invernadero en los próximos años con los proyectos que se buscaba aterrizar en el territorio poblano. Además del total de hectáreas identificadas, 150,000 se estimaron para consolidar proyectos en energía solar; 620,000 hectáreas para detonar parques eólicos; 250,000 para biomasa y 120,000 para geotermia.
Debido a la política en materia energética del gobierno federal, lo que impidió que se concretarán proyectos de inversión privada, la Agencia de Energía del Estado ha tenido que modificar su objetivo e inclinarse a una vocación social para llevar luz con celdas fotovoltaicas a las comunidades marginadas y escuelas.
El organismo público descentralizado creado también planeaba tener un fideicomiso para el desarrollo económico, cuyos recursos que se generarían serían para la promoción del estado como destino de inversión.
Además, se dispondría de un fondo de bienestar social para mejorar las condiciones de grupos vulnerables, el cual se alimentaría por aportaciones de las industrias.