Fuente: La jornada/ Alejandro Alegría
Ante los rezagos que existen en infraestructura física para educación, salud y actividades deportivas y culturales en el país, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) buscará que se impulse la inversión en esos rubros durante el gobierno de la hoy presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo.
En conferencia, Luis Méndez Jaled, presidente del organismo del sector privado, comentó que continúan identificando las necesidades que tiene la nación en infraestructura para hacer propuestas a la siguiente administración federal.
Añadió que es necesario incrementar significativamente los recursos que se destinan a educación y salud, en línea con las recomendaciones de los organismos internacionales, que es de 6 por ciento del producto interno bruto (PIB) para cada uno de estos dos rubros.
Apuntó que se debe dar prioridad a las obras de construcción, rehabilitación y mantenimiento de escuelas, clínicas y hospitales públicos.
La CMIC consideró que es necesario complementar los recursos presupuestales para obras de educación y salud con mecanismos financieros transparentes para el desarrollo y mantenimiento de infraestructura social estratégica.
Propone crear un fondo de rehabilitación
El organismo pidió crear un fondo de rehabilitación y mantenimiento de escuelas que disponga por adelantado de 25 por ciento de los recursos del Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM), lo cual permite la Ley de Coordinación Fiscal.
Méndez Jaled señaló que se debe vigilar que los recursos asignados a la construcción y mantenimiento de escuelas y hospitales se ejerzan en su totalidad, y que se establezca un marco regulatorio más estricto para evitar subejercicios en temas socialmente prioritarios.
Apuntó que en salud la inversión en infraestructura física debería ser de alrededor de 80 mil o 90 mil millones de pesos.
Comentó que entre 2016 y 2022 el gasto de los hogares en salud se incrementó en cerca de 30 por ciento, por lo que el país necesita contar con más y mejores clínicas y hospitales públicos bien construidos, equipados y con mantenimiento adecuado, capaces de brindar servicios médicos de calidad. De esta manera, la población incurrirá en menos costos al recibir atención en los servicios públicos de salud.
Méndez Jaled comentó que la infraestructura social contribuye a mejorar la salud y la educación de la población, lo cual fortalece el capital humano y la productividad del país, con un efecto favorable en el desarrollo y en la calidad de vida.
Explicó que, si bien durante décadas México logró desarrollar una amplia red de clínicas, hospitales, escuelas y centros de cultura, el país aún requiere superar algunos desafíos en este tipo de infraestructura.
En cuanto a la infraestructura cultural indicó que se encuentra concentrada en las grandes ciudades, mientras en el ámbito municipal enfrenta problemas por falta de mantenimiento.